Los Prekinder del Liceo Juana Ross de Edwards visitaron la Tercera Compañía de Bomberos de Valparaíso.
Los tres Prekinder, acompañados por sus educadoras, asistentes de aula y algunos apoderados, visitaron la mítica compañía de bomberos ubicada en avenida Pedro Montt.
Los niños y niñas recorrieron la Compañía junto a los bomberos que dirigieron la visita. Ahí pudieron conocer las dependencias, algunos instrumentos e implementos y subirse a un carro bomba.
Además, pasaron por el salón donde se aloja toda la historia de la Tercera Compañía, donde bomberos jóvenes y otros más antiguos dieron una didáctica charla de lo que hacen como voluntarios.
Cada uno de los niños y niñas miraban con asombro y curiosidad todo lo que había en el lugar. El compartir con los voluntarios, les permitió conocer más de cerca este importante trabajo.
Esta visita estaba enmarcada por el Día del Bombero, que se conmemora el 30 de junio de cada año. Los cursos le llevaron un regalo a los bomberos, que consistía en un cartel elaborado por ellos mismos.
La visita se realizó el viernes 5 de julio, teniendo un turno dedicado para cada curso.

 
Algo de historia la Tercera Compañía
El 30 de junio de 1851 se fundó la Asociación de Bomberos Voluntarios de Valparaíso, primera institución en su género creada en el país para la defensa de las propiedades contra los incendios.
Valparaíso, en esa época, se dividía en dos barrios: Puerto y Almendral. El primero configurado en gran parte por casas comerciales, particulares, instituciones públicas, recintos portuarios y otros. Por el contrario, el Almendral, era un barrio residencial. La comunicación vial entre uno y otro no era del todo expedita.
Dos grandes incendios dieron la voz de alerta para planificar la creación de una nueva Compañía de Bomberos en el sector Almendral, todas las que conformaban a la Asociación, estaban ubicadas en el sector Puerto. A consecuencia del último de esos incendios, ocurrido el 1 de septiembre de 1853, vio amagada su casa habitación el importante hombre público y potentado de ese entonces, Matías Cousiño, quién realizó un valioso aporte, para crear un cuartel en el Barrio Almendral.